Hoy día los clientes se pueden topar con muchas opciones para encontrar un fotógrafo de maternidad. Y la primera pregunta que te debes hacer es ¿Por qué ese cliente me eligió?
Una sesión de maternidad es un recuerdo que se lleva para toda la vida, es una sesión especial, fotos que se las transmitirán a los hijos y que muchas veces van a ser compartidas entre sus familiares y amistades. Tu como fotógrafo debes capturar lo mejor del momento, que pueda proyectar sentimiento y reflejar la esencia de lo que es la maternidad.
A la hora de realizar fotografía de maternidad tienes que tener en cuenta que el cuerpo de nuestra clienta está creciendo y cambiando, y la tienes que hacer sentir cómoda, antes, durante y después de la sesión de fotos. La clienta desde el primer contacto que tendrá contigo tendrá en su mente que le vas a entregar fotos preciosas. Es una gran responsabilidad, así que antes de comenzar a tomar fotos, te debes familiarizar bien con los detalles que conlleva ser un fotógrafo de maternidad.
1- Debes familiarizarte con poses. Invierte tiempo en aprender a proyectar el cuerpo de una mujer embarazada. La mayoría de tus clientes no van a ser modelos profesionales, y naturalmente no sabrán cómo ceñir sus cuerpos para resaltar sus mejores características. Puedes practicar con tus amigas embarazadas. También te puedes inspirar mirando revistas que presentan mujeres embarazadas o no embarazadas.
2- Cómo vestir a tu cliente. Algunas mujeres quieren usar un traje largo, algunas quieren posar en ropa interior, otras quieren posar desnudas, todas son diferentes, pero un buen punto de partida para el vestuario es lo que ya está en el armario de tu cliente. Hay fotógrafos que le ofrecen al cliente vestuarios que ya tienen con ellos, pero aquí lo más importante es que el cliente se pueda sentir a gusto con la vestimenta que va a utilizar en su sesión de fotos, que exalte el cuerpo de una embarazada.
3- Dar dirección. No te muestres tímido al fotografiar a tu cliente. ¡Tienes un trabajo que hacer, y la mejor manera de hacer ese trabajo eficientemente es a través de una gran dirección! Los primeros diez minutos de la sesión lo puedes utilizar para conocer a tu cliente, conectarte con ellos y ponerlos cómodos. Una vez que hayas comenzado guíalos a través de cada pose, y muy importante, imita las poses junto a ellas o a distancia, para que ellas se puedan sentir cómodas. Mientras vas retratando puedes ir conversando con ellas de como va su embarazo y hasta las puedes ir felicitando para que se sientan mucho más tranquilas y en confianza.
Tener en cuenta que muchas mujeres no se sienten a gusto en su tapa de embarazo y si puedes desarrollar la confianza de tu cliente, eso te ayudará a crear mejores poses y obtendrás mejores resultados en tus imágenes.
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